Casa Carassale

Ubicación: Costa Esmeralda, Provincia de Buenos Aires, Argentina
Proyecto y Dirección: María Victoria Besonías, Luciano Kruk
Colaboradores: Ekaterina Allaria
Superficie del terreno: 1024m2
Superficie construida: 163m2
Año de construcción: 2012
Fotos: Gustavo Sosa Pinilla

MEMORIA
por María Victoria Besonías

El lugar

Costa Esmeralda es un emprendimiento privado sobre los médanos de la costa bonaerense, a 390 Km de la ciudad de Buenos Aires. Se trata de una urbanización reciente con una forestación joven de acacias y pinos marítimos con algunos sectores de bosque consolidado.
El lote a intervenir está en el borde de una zona de vegetación joven. Se encuentra ubicado entre un predio más alto y con una tupida plantación, a la izquierda, y otro bajo, sin vegetación plantada y con abundantes pastizales de la zona, a la derecha.
Específicamente, el terreno cuenta con algunas acacias y sólo nueve pinos marítimos jóvenes- la mayoría agrupados cerca de la línea de frente, uno en el centro y otro en el fondo- de manera que el proyecto se inicia con la premisa de preservar la totalidad de los árboles existentes.

El encargo

Este fue un pedido muy particular ya que uno de los miembros de la pareja que contrata al estudio es una arquitecta que, al no poderse ocupar de la ejecución del proyecto por razones de tiempo y distancia, recurre a colegas con quienes comparte criterios arquitectónicos.
Cuentan en la primera entrevista que si bien la familia está integrada por la pareja más tres niños pequeños, la idea es contar con muchos lugares para dormir ya que piensan compartir la casa con amigos durante largas estadías. Por esa misma razón, la zona social tenía que ser también de dimensiones generosas. Por lo tanto se sugirió resolver algunos dormitorios como camarotes, ya que la casa no podía superar los 150 o 160 m2. El lugar de reunión debía integrar la cocina y tener un hogar que permitiese hacer asados, cuando no fuera posible hacerlos a la intemperie. Tenía contar también con parrilla al aire libre, lugares de expansión y un lugar para ser usado como lavadero y depósito para elementos de playa.
Se resaltó también la necesidad de contar en todos los ambientes con una relación muy fluida con el exterior. La formalización de la vivienda tendría que ser austera y de muy bajo impacto en un entorno agreste muy valorado por los comitentes.

La propuesta
Se decidió ubicar la vivienda en la zona central del predio – la más alta y con un único árbol para integrar- resolviéndola en dos volúmenes perpendiculares entre sí que se cruzan a diferentes alturas, siguiendo el relieve del lote, separándose en la unión para dejar pasar un pino marítimo de pocos años pero que con el tiempo se transformará en protagonista.
oestecerrada es la que se corresponde con la circulación y el baño general, y la este abierta con grandes ventanales que permiten la integración de tres de los dormitorios con el exterior. El último dormitorio, y el principal, se abre hacia el fondo con un importante semicubierto y una terraza privada al resguardo de las vistas del resto de la vivienda y con vistas a un paisaje agreste, que no va a variar en el tiempo ya que no hay vecinos lindantes con el fondo del predio.

Casa Carassale

Ubicación: Costa Esmeralda, Provincia de Buenos Aires, Argentina
Proyecto y Dirección: María Victoria Besonías, Luciano Kruk
Colaboradores: Ekaterina Allaria
Superficie del terreno: 1024m2
Superficie construida: 163m2
Año de construcción: 2012
Fotos: Gustavo Sosa Pinilla

MEMORIA
por María Victoria Besonías

El lugar

Costa Esmeralda es un emprendimiento privado sobre los médanos de la costa bonaerense, a 390 Km de la ciudad de Buenos Aires. Se trata de una urbanización reciente con una forestación joven de acacias y pinos marítimos con algunos sectores de bosque consolidado.
El lote a intervenir está en el borde de una zona de vegetación joven. Se encuentra ubicado entre un predio más alto y con una tupida plantación, a la izquierda, y otro bajo, sin vegetación plantada y con abundantes pastizales de la zona, a la derecha.
Específicamente, el terreno cuenta con algunas acacias y sólo nueve pinos marítimos jóvenes- la mayoría agrupados cerca de la línea de frente, uno en el centro y otro en el fondo- de manera que el proyecto se inicia con la premisa de preservar la totalidad de los árboles existentes.

El encargo

Este fue un pedido muy particular ya que uno de los miembros de la pareja que contrata al estudio es una arquitecta que, al no poderse ocupar de la ejecución del proyecto por razones de tiempo y distancia, recurre a colegas con quienes comparte criterios arquitectónicos.
Cuentan en la primera entrevista que si bien la familia está integrada por la pareja más tres niños pequeños, la idea es contar con muchos lugares para dormir ya que piensan compartir la casa con amigos durante largas estadías. Por esa misma razón, la zona social tenía que ser también de dimensiones generosas. Por lo tanto se sugirió resolver algunos dormitorios como camarotes, ya que la casa no podía superar los 150 o 160 m2. El lugar de reunión debía integrar la cocina y tener un hogar que permitiese hacer asados, cuando no fuera posible hacerlos a la intemperie. Tenía contar también con parrilla al aire libre, lugares de expansión y un lugar para ser usado como lavadero y depósito para elementos de playa.
Se resaltó también la necesidad de contar en todos los ambientes con una relación muy fluida con el exterior. La formalización de la vivienda tendría que ser austera y de muy bajo impacto en un entorno agreste muy valorado por los comitentes.

La propuesta
Se decidió ubicar la vivienda en la zona central del predio – la más alta y con un único árbol para integrar- resolviéndola en dos volúmenes perpendiculares entre sí que se cruzan a diferentes alturas, siguiendo el relieve del lote, separándose en la unión para dejar pasar un pino marítimo de pocos años pero que con el tiempo se transformará en protagonista.
oestecerrada es la que se corresponde con la circulación y el baño general, y la este abierta con grandes ventanales que permiten la integración de tres de los dormitorios con el exterior. El último dormitorio, y el principal, se abre hacia el fondo con un importante semicubierto y una terraza privada al resguardo de las vistas del resto de la vivienda y con vistas a un paisaje agreste, que no va a variar en el tiempo ya que no hay vecinos lindantes con el fondo del predio.